sábado, 2 de febrero de 2008

Abriendo las puertas de los infinitos cuartos

Digo, para arrancar podría copiar algún texto con el que me identifique (o quiera que los demás me identifiquen, que a esta altura es casi lo mismo) o agregar algún chiste de Liniers, o copiar la letra de una canción de esas que ridiculizan hasta al más avispado de mis intentos poéticos... pero de pronto: la imagen.
Un espejo frente a otro, tête à tête, y la imagen incluyente repetida al infinito. ¿Para qué negarlo? me dió temor. ¿Acaso no es eso mismo este espacio respecto de todos los demás? Un espejo adentro de otro, una infinita repetición de textos que ya fueron repetidos y lo serán en el futuro... qué triste !!
"Abriendo las puertas de los infinitos cuartos" decía Cortázar de Juan en "62 Modelo para armar"... esto será mi rincón en la web: un cuarto.

1 comentario:

  1. Ce: gracias por lo que me escribiste....de verdad. Yo también te adoro y quiero atreverme a darte un consejo: ``nunca dejes de escribir´´.



    Vane______________*

    ResponderEliminar